Con las manos sembradas en la espalda
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La celda es un paraíso de sal
donde la muerte amamanta hongos de silencio.
La oscuridad pare gemelos ciegos
y una utopía llora dientes de cristal.
...
Hace 17 horas

2 comentarios:
la extensión de mi piel te pertenece
desde hace siglos, desde que tus botas seguras
la nombraron su tierra y me colonizaste.
Elije este destino,
tiene sed mi desierto.
Igual cuando Colón surcó los mares sabía que eras tú el descubrimiento.... jaja
Gracias por ser, Sil, poeta y compañera.
Abrazo.
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