TEMPUS FUGIT

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¿Por qué sigue latiendo la entelequia,
culpable de apresar
el tiempo que no existe?

¿Por qué tan disonantes
los ecos del ayer,
el inaudible canto
sintiéndonos a solas?

Me adentro en la memoria que aún palpita
la simiente de abril,
las ráfagas de luz que tan fértil te asoman
a la noche florida,

amaneciendo, amor,
a ti

en tristeza.




Manuel M. Barcia

PALABRA NOCHE

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Cansado de hacer magia en la escritura,
aunque sea mi hechizo
trasbordo del ayer,
lo que une las almas separadas.

Ya me harté de conjuros en la sombra,
escuchar lo inaudible con ecos de tu voz
en mis sueños exhaustos.

Yo te sentía entonces misteriosa
y realidad también,
en el tiempo palpable de nosotros,
sin claustros, sin promesas,
al desnudo.

No sé cuando te fuiste,
arrancada de mí,
tangente del olvido y los perdones.

Hoy la palabra noche ocupa todo.




Manuel M. Barcia

NEUROTRANSMISIONES

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* No importan los instantes suspensivos. Actúo al revés y punto!

* Recordar a mi memoria lo inútil que resulta el tiempo del olvido.

* ¿Quién era esa mujer que viajaba en la trasera de mi moto? ¿En dónde se apeó?

* No hablar conmigo mismo en luna llena.

* Es el cuatrianiversario de mi blog. ¿Será así cómo se dice? ¿Será el cuatro el número confín?
No encuentro qué rimar con celebraciones...

* Debo escribir el último poema. Hace tiempo que no hago promesas infundadas.

* Elegir un color para las tardes de otoño. (Azul tenue tal vez...)

* Borrarme de la peña. No ir nunca jamás al karaoke. Bajar música celta cuando pueda.

* ... Y si estuviera loco de verdad... ¿Quién atendería los estados depresivos de mi psicoanalista?
Responder afirmativamente siempre, por si acaso.

* Consultar cuando llega la andropausia. Decirle que no existe.





Manuel M. Barcia

EN BUSCA DE LA SÍLABA OM

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Medir exactamente las palabras,
ser en su creación
universo y sostén,
destino que despierta lo purificador.

Allí está la meta,
todo lo que trasciende de los conocimientos,
mi yo devocional

y la iluminación,

el más hondo secreto de sentir lo que soy
con el alma desnuda,
poeta internamente,
del mundo separado.




Manuel M. Barcia

LAS NUEVE MUSAS

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Como la madreselva,
floreces las imágenes sin luz,
el aroma del sueño.

Sombreas mi jardín
y detienes la noche.

Mis versos blancos duermen,
buscando inspiración;

tan lejos hoy de mí
las nueve musas.




Manuel M. Barcia

SEMIDIÓS EN TU SOMBRA

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Para que tú me amaras
los árboles tuvieron que sembrar
nidos de mariposa

y atravesar el cosmos

sólo para crecer

raíces de universos estrellados.

En el linaje aquel
apenas era yo un laberinto,
la espiral de los sueños que lo rigen,
semidiós en tu sombra.



Manuel M. Barcia.

LIBERTAD SIN REMEDIO

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De repente, huí...

bebiendo de la sed ardores desolados,
de tu púbis la unción,
oasis del desierto que me aleja,
libertad sin remedio,

yo que siempre te amé tiranizadamente.



Manuel M. Barcia

LA MURALLA

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Nada importa el lirismo cuando el verbo es hostil,
la luz tan corrompida
y mi voz tan cobarde.

Seré la construcción de la muralla,
la raíz que surgió
brotando las almenas del silencio,
esa melancolía,
ese altar entre verdes,
ese bosque de hayas sin destino,
toda mi desnudez revistiendo las rocas.

La vida no es excusa para sembrar dolor,
ni eternamente riña,
ni lágrimas sedientas de amargura;

transcurre,
sin certeza

y  en su grupa mi ego
con pasos de arrogancia y vanidad,
el sostén de los sueños,
las huellas invisibles, las quimeras,

lo que queda después de transitar
los senderos de olvido.



Manuel M. Barcia

TÁNATO-EDICIÓN

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¿A qué tanta condena en un cartel?

Escrito un epitafio
ya no importa morir,

la idea de no-ser justifica el mañana,
o acaso quebrantar los principios de luz
en lo que no envejece,

apenas experiencia en lo absoluto
lo salvaje sin ley
y el adiós por costumbre en los gestos del aire

mientras buscan destino las palabras
y a ti bajo mi pecho.



Manuel M. Barcia

LA JAULA DE LOS SOLOS

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Hay cosas que es mejor no escribir nunca.
Hay cosas que es mejor no hacer nunca.
Hay demasiadas cosas con sus demasiados nuncas esta noche.

Gavrí Akhenazi.






Deletreo la noche de los solos,
tu aparente maldad,
la lucha por las causas sin remedio;

hasta que las palabras amanecen
escritas por la vida,
por la sangre de ti

como una gran novela.

Si pudiese yo ser la libertad,
ese vuelo hacia nunca,
tendría siempre África de mí
tu inmensa biografía.



Manuel M. Barcia