--
Antes de mí, tan sólo inspiraciones
copulando quietud,
palabras de papel con que burlar
el asedio veloz
de lo imaginario.
Mas no podré saber
quiénes fueron sembrando
plantaciones de abril
mientras la sombra finge medialuna
y un verso en lejanía.
Soy margen desvalido en el final,
un apartado punto
sin reseñas de musas que otorgar
ni cárceles de piel que me cautiven.
En esta ingravidez,
en su calma sin noche,
ecos del escritor que fue leyenda
de lo que cumple luz
por tiempo hereditario
y me nombra,
como un instante en ti,
sonora libertad
si enmudecieras
la risa, el vientre
y todo.
mmb
4 comentarios:
Hasta el titulo suena a despedida,nunca se sabe cuando pueden volver las musas,la esperanza es lo ultimo que se pierde,animate porque tu inspiracion es la ilusion de muchos.....eso es lo que me han transmitido tus palabras pero como todo esto es tan subjetivo no se si estoy en lo cierto o me he dejado llevar por mi intuicion.
No hay final, Manuel, mal que nos pese. Se es o no se es poeta y eso, no lo cambia nada ni nadie. Es una forma de ser una actitud ante la vida que va más allá de la palabra.
No hay final, Manuel, ni nada que nos libre de la condena.
Te quiero, compañero.
Namasté.
María José
Tras lo que nombra la intuición hay un grito que eleva las palabras al desván del silencio, un eco muy lejano del que un poeta no regresa.
Acaso fueran voces las plegarias en el humo que ofrenda a las hogueras.
(Cosas de San Juan, supongo)
Graciaspor volar en estas sombras.
M de P
Esa mirada en ti, tan adivina...
Lo hermético del alma me ha asombrado, Mor, ha cubierto mis ojos con muros de memoria y horizontes sin destino en las palabras.
No obstante volveré a ser querencia en el espejo, versal en el presente que me ciega, y del estro condena.
Gracias por quererme y permitir que te quiera.
Abrazo.
Publicar un comentario