---
Aunque el azar nos haya dividido
y en nuestro girasol se convirtiera,
los dos somos raíz del universo
que brota en coordenadas diferentes
los destinos gemelos.
Y, aunque la luz aplaste la distancia
y el sur sobre nosotros palidezca,
libélula seré cantando tu hermosura
a pesar de mi noche inexistente.
Y nadie cegará nuestro secreto,
los márgenes etéreos
abrazados al viento entre la hiniesta,
con aromas de ti, de tu silencio.
Y acaso soñaré sin conocerte,
eterna en un adiós,
besándote feliz,
sin aspavientos.
Manuel M. Barcia
Conversación con mi alma
-
Hablo contigo en el silencio donde la palabra es oscura,
allí en la sima no hay luz, solo el negro pulso de las horas
me hace sentir que tú eres la ...
Hace 3 horas
2 comentarios:
Maravilloso, Manuel.
Un poema etéreo que guarda en sus palabras mucha belleza.
Te dejo un beso de meiga soñadora
Ana
Hay sueños y deseo en su raíz. Será eso, supongo...
Gracias por estar tan presente en el tercer aniversario de este EMBRUJO DE FUEGO que contigo celebro, meiga.
Un beso
Publicar un comentario