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Quise escribir mis versos
tintados de dulzura que acaricia
las páginas de luz fruto del tiempo
que duerme en los silencios del otoño
Quise escribir palabras de deseo,
ser patria de los sueños a orillas del delirio,
amante solitario,
galope desbocado de un latido de mujer
Pero no existe mi corazón hembra,
mi alma es pequeña,
me duelo de las ansias imposibles
de en mí un vientre crecido
y gracia en su simiente
preñada de poesía
Quise escribir mis versos
soñando ser la flor de un ramo de mujer.
a Stella, mujer, poeta, persona maravillosa.
Manuel M. Barcia
La llamada
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Agreden las palabras cuando comunican un adiós.
Por eso escogiste un bar desconocido
y una hora en la que no nos veiamos,
la primera hora de la mañan...
Hace 1 hora
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4 comentarios:
Querido amigo y compañero, gracias por estasorpresa impresionante, l´´ogicamente no la esperaba y has conseguido que me emocionara, los versos....exquisitos y la alegria que me has dado tremenda
GRACIAS, lo he subido a mi blog
Un abrazo grande
Stella
Como ves los acentos no funcionan bien
Precioso poema, Manuel.
Exquisito y muy sentido.
Un beso soñador para ti y otro para Stella
Ana
Me hace muy feliz saber que te ha gustado, Carmen.
Gracias por el regalo de tu aprecio.
Un beso sin tildes.
Manuel
Un abrazo sanador para ti, meiga, y mi agradecimiento más sincero por tus palabras.
Un beso
Manuel
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