---
Resuena todavía aquel musette.
Danza libre tu amor, notas al viento
de una suite pastoril y mariposas.
El límite del tiempo no existe,
la luz relampaguea en la mujer
despertando acordes de emoción
ocultos tras el rostro de la noche.
Y yo bailaba solo, sobre el mar
también embravecido en la locura
de podernos temblar, inmensamente,
fuelle de acordeón y el infinito.
Manuel M. Barcia
El mar de la noche
-
Hay en tu rostro una herida donde las sílabas en calma
se adormecen como barcos sin un mar que los agite.
Riela la lluvia bajo el farol, allí se ref...
Hace 9 horas
4 comentarios:
Delicioso, este poema es delicioso, es lo primero que me ha venido a la boca al leerlo.
Concha dixit.
Me alegra ser en ti tanta emoción, Concha.
Gracias por tu eco de mar en esta sinfonía de música y palabras.
Un beso
Tu poema como danzar con el amor...
Un saludo cariñoso desde mi Blog.
Es una imagen preciosa, Leticia. Gracias por recrearla entre los ecos del Musette.
Un beso
Publicar un comentario