Sos la pésima actriz que ocupa los teatros
con butacas vacías y tiempo en soledad
mientras sueña el telón
los ecos de un aplauso y el vaivén
de las obras finitas.
Sos sombra de un temblor sin más virtud
que un empuje hacia arriba,
alzamiento que hostiga vanidades
para luego caer, en medio de la nada,
pregunta sempiterna de un por qué,
de súbito la noche
en alas de un prodigio.
Hágase en vos la luz,
para que sea yo la transparencia
del negro que te ocupa
y luego sé la imagen del calor,
desnudez que resuma caricias y deseo
en profundo existir,
sin interpretaciones desalmadas,
sin más adaptación
que la sed de la lluvia siendo orgasmo final,
sin inútiles presas,
sin vos con fingimiento.
mmb
3 comentarios:
mmmmm
Manuel no veo lo que escribo, nosé cuál es el problema.Esoty escribiendo a ciegas, me encantaron tus letras, hago teatro..besoss
Gracias por ser representación de tan visible ceguera, Doris.
Un beso.
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