*
Mi palabra no cabe
en ecos repetidos que se fueron
En su mudez,
quedan abandonados
los signos que me unen al olvido
en la imagen del sueño que no tengo
Se va la soledad hacia el ocaso,
mi tiempo de razones se deshace
en sílabas perdidas
que buscan en la aurora del silencio
su origen ilusorio de quimeras
Quizás esta quietud entre la bruma
que tiene la apariencia de un paisaje
dormido para siempre en su nostalgia,
sea sólo la luz que me reclama
allí donde se esconden las creencias,
memoria sin amor que me condena
a escribir los recuerdos de la nada
en sombras que preceden al vacío
cuando expiran los versos.
Manuel M. Barcia
La sobriedad intelectual
-
La sobriedad espiritual
Es un segundo de inocencia
Descubriendo la intelectualidad
Del grillo que canta por las noches
Noches de luna ll...
Hace 1 hora
3 comentarios:
Poemazo, Manuel.
Un poema que se siente intensamente, con un final espectacular.
Un beso
Ana
Me alegra que te agrade este final, cuando expiran los versos, meiga.
Gracias por tu compañía.
Un beso
Manuel
Estamos todos aquí:
Foro Aires de libertad (Foro de Walter Faila):
http://airesdelibertad.foroactivo.com/
Un abrazo
Ana
P.D.: Regístrate. Está muy bien. Por el momento estamos 215.
Publicar un comentario