No siempre son producto de la magia
las fuerzas envolventes
que hacen del misterio una utopía
En mis sueños pareces tener
la misma transparencia de un espejo
cuando es viento la luz que te refleja
preñada en sus adentros de poesía
Y veo a través de tus cristales
un rostro y un corazón adormecido
en bóvedas oscuras del silencio
En las sombras etéreas
soy hilo conductor y su semblante
Y tomo de la noche tu silueta,
gravitando en mí mismo
la visión invertida de tu cuerpo,
donde el alma se extiende, y me amas
Y al final del poema
te amo desde nunca y nada espero,
o acaso fuiste siempre.
Manuel M. Barcia
6 comentarios:
muy bonito
CHELO
Como un salto de gacela...
Gracias por dejar tu linda huella, Chelo.
Un beso
Tal vez el amar de ese modo no tenga una línea definida,entre el antes y el núnca,puede tejerse la trama de lo inesperado,quizas ahí reside la magia.
Saludos,poeta.
Amar es deconcierto, Paloma, la acústica del viento en la música del alma, es tacto, es fuego, es paz...
Gracias por tu vuelo.
Un beso
Manuel
Hermoso, Manuel.
Un beso
Ana
Me alegra que te guste, Ana.
Gracias por tu huella.
Un beso
Manuel
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