---
Llegó en la lejanía inexplicable
el tiempo de partir.
Ignoro si detrás de mi silencio
despunta todavía la razón
que trajo a mi destino soledades
promisoras de ausencia.
La voz de la palabra es inexacta,
a veces contracción de su discurso,
o el fútil pensamiento
del poeta ensombrecido por la duda.
Sólo queda citar en este adiós
las memorias que caben en un verso
cuando el fin se pronuncia sin señales,
carente de avatar.
Porque el humo también fue del fuego la quimera
y embrujo
y utopía
y el ardor
de mi luz interior mientras sentía.
Manuel M. Barcia
Poema del día: "Bejuco silvestre en invierno", de Geoffrey Hill (Gran
Bretaña, 1932-2016)
-
La vieja dicha del viajero aparece,
desnuda,
como una flor de espino
mientras el coche ingresa en la ciudad
entre borrosos pormenores…
Liana silvestre vert...
Hace 6 horas
2 comentarios:
Cada poema tuyo, es llegar al placer en su lectura, entrañarlo desde la palabra que hoy declara la incertidumbre ante la verdad de lo incierto sin tiempo.
Aquí de nuevo Manuel. Un abrazo .
Muda, mi amiga,
sola en lo solitario de esta hora de muertes
y llena de las vidas del fuego,
pura heredera del día destruido.
Son, como tú bien sabes, Leticia, versos de Neruda. Me vinieron así, repentinamente a la memoria, y así los transcribí.
... Tal vez porque hoy no encuentre las palabras para agradecer tu tiempo en mi nostalgia...
Un abrazo grande y gracias por venir.
Publicar un comentario