---
Del tiempo en mis ruinas concebiste
el pulso nigromante del mistral,
parásito en la herencia.
El sueño tan cercano de una niña
fue amor por descubrir,
fulgor de irrealidad tras los espejos.
Y fuimos soledades hacia el sur,
patrimonio de nadie,
sólo genes del viento,
un flujo porvenir de la memoria
y en su vientre
suicidio.
Manuel M. Barcia
Poema del día: "Cisne", de Fiama Hasse Pais Brandão (Portugal, 1938-2007)
-
*Esta ave sigue un extremo*
* que canta contra razón*
* cuando mata el corazón.*
Gil Vicente (far...
Hace 1 hora
2 comentarios:
Espléndido y certero.
Besos.
Gracias por tu viento de azul mediterráneo, Paloma.
Un beso
Manuel
Publicar un comentario